En las últimas semanas la opinión pública ha tenido noticias de la existencia de la Ley Federal Rusa sobre la Protección de Niños de Información Dañina a su Salud y Desarrollo, una norma que, entre otras medidas, impone multas para las personas que proporcionen propaganda de contenido homosexual a menores de 18 años. Ucrania y Moldova han promulgado normas similares a la rusa. Las críticas que ha recibido esos países han recibido cumplida réplica por parte de asociaciones pro-familia, que han hecho pública una declaración de apoyo a dichas leyes.
(PpE/infoCatólica) Como era previsible, la ley rusa ha despertado la ira de algunos lobbies que promueven el adoctrinamiento de menores en materia de relaciones personales, matrimonio entre personas del mismo sexo y difusión de las diferentes orientaciones sexuales (ideología de género). Sin embargo, la norma también ha despertado la adhesión de numerosas entidades y ONG’s. Así la asociación Profesionales por la Ética ha difundido una Declaración internacional de apoyo a la ley rusa de protección del menor que están respaldando numerosas entidades sociales de todo el mundo.
El contenido de la Declaración es el siguiente:
Las entidades firmantes están extremadamente preocupadas por los fuertes ataques a los que se enfrenta la Federación rusa debido a su reciente Ley Federal de 29 de junio, 2013 No. 135-FZ «De Enmiendas al Artículo 5 de la Ley Federal Sobre la Protección de Niños de Información Dañina a su Salud y Desarrollo…» que protege la inocencia y formación moral de los niños, prohibiendo la propaganda de «relaciones sexuales no-tradicionales» entre ellos.
Afirmamos que la familia natural, creada a través del matrimonio de un hombre y una mujer, es el fundamento de cualquier sociedad humana y merece la protección de la sociedad y el Estado como está recogido en la normas internacionales de Derechos Humanos, incluida la Declaración Universal de Derechos Humanos (Art. 16.3). Cualquier iniciativa dañina a la familia natural es destructiva de la sociedad en su conjunto. También afirmamos que los niños necesitan una protección especial debido a su inocencia e inmadurez.
Reconocemos que la ley rusa protege la inocencia de los niños y los derechos básicos de sus padres reconocidos en tratados y legislación internacional. Con su nueva ley Rusia protege derechos humanos genuinos y universalmente reconocidos contra «valores» artificiales y fabricados que se intentan imponer agresivamente en muchas sociedades modernas. Asimismo hacemos constar que los conceptos de «orientación sexual» e «identidad de género» no están recogidos en los tratados y acuerdos internacionales vinculantes existentes.
Por tanto hacemos una llamada por el respeto a la soberanía del pueblo Ruso e invitamos a todas las organizaciones y personas que se sienten responsables en la protección de la inocencia de los niños y sus derechos, la familia natural y los derechos paternos a salir a la defensa de Rusia, como también por Ucrania y Moldova, quienes sufren la misma presión por leyes similares.
Como explica Leonor Tamayo, responsable del Área Internacional de Profesionales por la Ética, «Rusia, Ucrania y Moldova han concretado en leyes nacionales los tratados internacionales que protegen a los menores y su desarrollo integral biológico, intelectual y moral. Y es legítimo que los países, en el uso de su soberanía, quieran proteger a sus niños frente a la propaganda y el adoctrinamiento en cuestiones tan delicadas como la sexualidad, las relaciones personales y la concepción de la familia».
Tamayo ha adelantado que las adhesiones internacionales a la Declaración crecen a ritmo vertiginoso. «La opinión pública, en todos los países, no se había pronunciado sobre este tema de manera organizada. Pero en el momento en el que se ha dado la oportunidad de pronunciarse, la sociedad civil y personas de todo el mundo están respaldando a Rusia en este tema».