La ingesta de bebidas azucaradas se duplica entre los adolescentes europeos más sedentarios que pasan más de cuatro horas diarias ante el televisor e internet y disminuye casi un 60 por ciento entre los que más estudian.
Estos son algunos de los datos obtenidos en un estudio realizado por el grupo de investigación GENUD (Growth, Exercise, Nutrition and Development) de la Universidad de Zaragoza, coordinado por el profesor Luis Moreno, sobre 2.200 adolescentes con edades comprendidas entre 12,5 y 17,5 años procedentes de ocho ciudades europeas (Atenas, Dortmund, Gante, Lille, Roma, Estocolmo, Viena y Zaragoza).
Para la realización de este estudio, la investigadora Alba Santaliestra-Pasías, así como el resto de colaboradores del grupo GENUD, han utilizado datos del estudio transversal HELENA (Healthy Lifestyle in Europe by Nutrition in Adolescence) junto con el tiempo que los adolescentes europeos dedican a actividades sedentarias, como la utilización de medios electrónicos.
El estudio ha detectado que los adolescentes europeos dedican a las pantallas más de cuatro horas diarias: dos horas a ver la televisión, una hora a jugar a los ordenadores y otra a utilizar internet en su tiempo libre.
Estos datos se unen a los obtenidos en otro estudio internacional que sugiere que estas conductas sedentarias influyen en el consumo de diversos tipos de alimentos, como las bebidas refrescantes, que aumenta, o las frutas o verduras, que disminuye, por lo que aumenta el riesgo de padecer enfermedades crónicas como la obesidad.
En cuanto a la relación entre el tiempo de estudio que dedican los adolescentes y el consumo de diversos alimentos, los investigadores han determinado que ese consumo de bebidas azucaradas disminuye hasta un 60 por ciento entre los que más estudian, aunque este comportamiento está en buena medida íntimamente ligado al ambiente familiar.