El consejero de Sanidad, Bienestar Social y Familia del Gobierno de Aragón, Ricardo Oliván, ha presentado este martes el folleto que ha editado el Ejecutivo autónomo relativo al consumo responsable en tiempo de crisis, al apreciar que es “clave” para las familias en la presente situación económica. El folleto se está distribuyendo entre los colectivos colaboradores para que sirva de efecto multiplicador de difusión en la sociedad aragonesa.
El objetivo es concienciar a los ciudadanos en consumir de forma responsable como actitud habitual. Según Oliván, “en unas circunstancias de crisis económica como la actual, así como de sobreendeudamiento de muchos de ellos, resulta aún más necesaria y urgente” esta actitud responsable en las compras.
El consejero ha afirmado que “el esfuerzo colectivo que están llevando a cabo los ciudadanos de nuestro país con el fin de superar de manera conjunta la situación de dificultad que atravesamos, requiere que, del mismo modo, y desde todos los sectores, se continúen adoptando medidas para garantizar que ningún ciudadano es conducido a una situación de exclusión social”.
En la jornada se ha destacado que en Aragón, las últimas medidas propuestas por el Gobierno autónomo para aliviar el esfuerzo de familias y ciudadanos en este tiempo de crisis son, entre otras, las deducciones en el Impuesto sobre la Renta por la compra de libros de texto, para beneficiar, en función de la renta y el número de hijos de la unidad familiar, a los aragoneses en la adquisición de libros de texto.
Será mediante una deducción en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Se trata de una medida que pretende garantizar el acceso “a unos niveles óptimos de educación pública, en igualdad de condiciones para aquellos ciudadanos que ven agravada su situación socioeconómica por unos menores ingresos y/o número de hijos”, señala el Ejecutivo en un comunicado.
También se actúa en atención a la discapacidad, con deducciones de la cuota íntegra autonómica del IRPF por nacimiento o adopción de uno de los hijos en atención al grado de discapacidad de alguno de ellos; y en el alquiler, ya que el arrendatario de una vivienda social (aquel contribuyente que ha puesto una vivienda a disposición del Gobierno de Aragón o de alguna de sus entidades para el Plan de Vivienda Social) podrá aplicarse una deducción del 30 por ciento en la cuota íntegra autonómica del IRPF.
Por último, se aplicarán varias deducciones en los supuestos de dación en pago de la vivienda hipotecada, lo que permitirá a los afectados disminuir sensiblemente la carga fiscal implícita en este tipo de operaciones y aliviar sus compromisos financieros con la vista puesta en una futura recuperación de la propiedad de su domicilio.
Según Oliván, estas son medidas que se adoptan en el marco de una crisis financiera, económica y de deuda soberana, “la más grave en muchas décadas, que ha afectado también con intensidad a la economía española interrumpiendo el periodo de crecimiento anterior. Las medidas que se están adoptando y en las que hay que profundizar, deben servir a un nuevo crecimiento equilibrado, duradero y sostenible”.