En mis clases en el IESE muestro a los alumnos una noticia que vi en La Vanguardia y en Expansión el 22 de abril del 2003. Decía el titular “American Airlines: las azafatas se replantean su acuerdo para rebajar su sueldo” y en el cuerpo de la noticia “… tras conocer los bonus prometidos a los seis altos ejecutivos del grupo al borde de suspensión de pagos…”. Resulta que ante la posibilidad de quiebra la dirección pide a las azafatas el esfuerzo de rebajar su sueldo, mientras que ellos se cubren las espaldas con un bonus. ¿Qué pasó?, pues la noticia de 4 días después, el 26 de abril, fue: “American Airlines: nuevo presidente y nuevo plan”. El presidente tras tamaña genialidad tuvo que dimitir para que se pudieran reanudar las conversaciones. Sí, pero desde entonces las cosas no iban a ser igual en la compañía.
En esa misma línea, hace unos días me contaron que en una pyme decidieron recortar el sueldo de los empleados en no sé qué porcentaje. El director financiero y de administración fue el encargado de comunicarlo. Este director financiero, pensando en cómo comunicarlo planteó a la dirección que cuánto se lo iban a recortar ellos. Comunicar un recorte de sueldos anunciando lo que la dirección se lo iba a recortar hacía más fácil encajar el palo. A tan atrevida pregunta el resto del equipo directivo contestó que la dirección no se lo recortaban nada. Este financiero quedó boquiabierto y sin argumentos para “venderles” el recorte a los empleados.
Cuando me contaban esta historia, algún otro que estaba en la conversación contó que eso era práctica habitual. Yo no sé si es práctica habitual o no. Pero es una muestra de incompetencia directiva. Con qué entusiásmo van a ir a trabajar al día siguiente todos los empleados de esa empresa. A American Airlines una práctica así le costó el puesto a su presidente.
Yo creo que montar una empresa y hacer que las cosas funcionen es algo difícil, por lo que siento respeto por los empresarios y directivos, pero el tratar a las personas con dignidad y respeto me parece que es algo elemental. Eso no debiera ser tan difícil. Con solo mejorar en este campo muchas empresas pasarían a ser excelentes y se haría más feliz la vida a muchas personas. Liderazgo es ir siempre por delante, para lo bueno y para lo malo. Aprovecharse de lo bueno y descargar sobre los demás lo malo es muy fácil, pero tiene muy poco recorrido.
Reflexionad sobre esto. Es muy fácil y marca una diferencia. Saludos desde Pekin donde estoy dando clase estos días.
Fuente:Toma de Decisiones. Miguel Angel Ariño.-Profesor del IESE