Forum libertas.Los últimos datos de Eurostat sobre el abandono escolar temprano en la Unión Europea son motivo de preocupación para los responsables del sistema educativo español: el ranking de jóvenes de entre 18 y 24 años que no están escolarizados y tienen un nivel de ESO o menor lo lidera España.
El informe de Eurostat muestra que un 23,5% de los jóvenes españoles había abandonado el año pasado la enseñanza de forma prematura, prácticamente el doble de la media en la UE (11,9%), y que España tiene la mayor tasa de abandono, tras superar a Malta y Portugal, como se puede observar en los gráficos que acompañan esta información, reproducidos a partir de la información publicada por el diario El País el pasado sábado, 12 de abril, con datos de Eurostat.
A esta situación cabe añadir la de los alumnos que repiten curso, que en España se sitúa a los 15 años en el 35%.
Además, en un país líder también en paro juvenil, este fracaso escolar no hace otra cosa que multiplicar los problemas del desempleo y del número de ‘ni-ni’ en España, es decir de aquellos jóvenes que ni estudian ni trabajan, cuya tasa se sitúa por encima del 17%.
Pero, ¿cuánto le cuesta al Estado español asumir el coste de los ‘ni-ni’ y el de los repetidores?
Cada repetidor, entre 7.700 y 8.500 euros…
Según datos de la OCDE, a partir del Informe PISA 2009, España es uno de los países europeos donde la situación de los repetidores es más acusada, solo superado por Francia y Luxemburgo.
“En Bélgica, España y Holanda, este coste representa al menos el 10% del gasto anual en primaria y secundaria, y el coste unitario puede alcanzar, e incluso sobrepasar, los 11.000 dólares”, dice el informe. La OCDE aclara que esto viene a suponer “unos 7.700 euros” y puede “alcanzar los 8.500 por alumno”.
Como es lógico, “los países que muestran un nivel de repetición elevado son igualmente aquellos donde los alumnos muestran menos competencias”, y los países que se sitúan en cabeza en cuanto al número de repetidores –como Francia, Luxemburgo, España, Portugal o Bélgica– obtienen resultados más bien mediocres, subraya el estudio de la OCDE.
“La repetición de curso de los alumnos engendra costes, particularmente la financiación de un año suplementario de formación del alumno, pero también el coste para la sociedad de retardar al menos un año la entrada de este alumno en el mercado laboral”, añade.
Ese retraso en su salida al mercado laboral supone un 10% del gasto educativo en España, frente a un 2% en aquellos países donde se da menos este hecho. Además, frente al gasto por repetidor de 8.500 euros en España, compara el de menos de 1.400 en los países donde es menos frecuente la repetición de curso. Otros estudios cifran en 1.500 millones de euros el gasto público de la repetición anual en España.
“La falta de esfuerzo, de motivación e interés”, y “la falta de apoyo familiar” son los responsables de ese gran número de repetidores en España, según un informe del Instituto Vasco de Evaluación e Investigación Educativa (IVEIE).
…y los ‘ni-ni’ 15.700 millones de euros
Por otra parte, según datos de Eurofound, el costo de los ‘ni-ni’ le representa a España alrededor de 15.700 millones de euros, lo que representaría en torno al 1,4% del PIB, un dato ligeramente superior a la media europea, que se sitúa en el 1,2.
En términos absolutos, el país para que el suponen mayor coste los ‘ni-ni’ son Italia (22.000 millones), Francia (18.000 millones) y Reino Unido (18.000 millones), situándose España en el cuarto lugar.
De acuerdo con esos datos, en 2011 hubo en Europa 7,5 millones de jóvenes de entre 15 y 24 años, y otros 6,5 millones de jóvenes de entre 25 y 29 años, que quedaron excluidos del mercado de trabajo y la educación.
Esto representa un incremento significativo en la proporción de jóvenes ‘ni-ni’: en 2008 la cifra era del 11 % de los jóvenes de entre 15 y 24 años, y del 17 % para el grupo de entre 25 y 29 años. En 2011 se ha elevado al 13% y 20%, respectivamente.
Existen enormes diferencias entre los Estados miembros, con tasas que varían entre las inferiores al 7 % (Luxemburgo y los Países Bajos) y las superiores al 17 % (Bulgaria, Irlanda, Italia y España).