Iniciamos el camino de la cuaresma. Este se abre con las palabras del profeta Joel, que indican la dirección a seguir. Hay una invitación que nace del corazón de Dios, que con los brazos abiertos y los ojos llenos de nostalgia nos suplica: ‘Vuelvan a mí con todo corazón’ (Jl 2,12). Vuelvan a mí. La cuaresma es un viaje…