No es recomendable jugar a la videoconsola en exceso
MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El uso inadecuado de los videojuegos por parte de los niños “puede afectar a su sociabilización”, tal y como ha explicado a Europa Press el psicólogo clínico experto en niños del Colegio Oficial de Psicólogos (COP), Abel Domínguez.
A su juicio, todo el tiempo que el menor pasa con la videoconsola, interactuando con la máquina, “no lo pasa interactuando con sus iguales”. Por ello, expone que éstos solo deben jugar con estas tecnologías “cuando acaben sus deberes y tareas”.
El también psicólogo infanto-juvenil de APEC señala que se tiene que “pautar el tiempo y procurar que los contenidos no sean violentos”. Además, es importante que, si el adulto no puede controlar el uso que se hace del videojuego, “se pongan medio para que no se use de manera inadecuada”, refleja.
Aunque Domínguez señala que, si no se toman estas medidas “se pueden ver afectados los valores del menor a la larga”, también expone que los videojuegos “pueden ser positivos”. Pueden ser considerados “como un premio”, asegura.
Por su parte, el director pedagógico de la Fundación Marcet, Pedro Marcet, ha indicado a Europa Press que el problema se origina cuando se producen dos circunstancias, siendo la primera el hecho de que los padres “tengan que ausentarse” del hogar. En ese momento, los niños tienen “más libertad” para estar metidos en lo que les gusta, y aprovechan para marcar sus horarios su diversión y entretenimiento “porque no hay un adulto que les controle”, afirma.
No obstante, también se da la circunstancia de que aunque los progenitores se encuentren en casa, los niños sigan dedicando el tiempo a jugar a estos tecnológicos juegos. Hay padres que “tampoco se preocupan mucho” de que haya un control más exhaustivo para que los menores se dediquen “a sus estudios o a otras actividades más apropiadas para la edad que tienen”, señala.
LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS ENTRETIENEN Y AÍSLAN
Todo ello se añade al hecho de que las nuevas tecnologías sean “un bombón” para los menores, ya que es una forma “de entretenerse, divertirse y asilarse”. De hecho, el ordenador y la consola “están por encima de la televisión y el cine” en sus preferencias”, manifiesta Marcet.
Ante ello, apuesta por la práctica deportiva, ya que “les ocupa ese espacio que tienen libre y les aporta muchísimo”. A su juicio, es algo “extraordinario” para los niños al ser una posibilidad “para adquirir valores y marcarse retos”.
En este sentido, Marcet sostiene que todo ello se ve aumentado si la práctica deportiva se realiza de manera colectiva porque es “incomparable” con respecto al deporte individual. Realizar esta actividad de manera grupal “socializa y hace que el menor se relacione con otros chicos”, asegura.
Además, subraya que el deporte “es lo más parecido a la vida”, ya que se lucha por conseguir objetivos “con esfuerzo y sacrificio común”. Por ello, considera que es “muy importante” fomentar el deporte colectivo desde que los niños son muy pequeños.
De cualquier forma, advierte de que éstos “pasan entre tres y cuatro horas diarias” con los juegos interactivos, algo que debe cambiar a sólo “una o dos horas los fines de semana”. “Lo recomendable es hacer lo que hacen los padres con ideas claras”, que saben que los menores tienen que “estudiar, leer y jugar con los amigos”, zanja.
Por último, el miembro de la Fundación Marcet expone que los jóvenes deben realizar deporte “un par de días a la semana de manera combinada con juegos en la calle con los amigos”. Lo contrario, como instalar un ordenador en la habitación del menor, es “meter al enemigo en casa”, concluye Marcet.
(EuropaPress)