La agenda abortista de la Cumbre de Nairobi es rechazada por diez países

Diez países, encabezados por Estados Unidos, se han opuesto a la agenda abortista de la Cumbre de Nairobi. La representante del país norteamericano leyó un comunicado en el que asegura que no apoyan referencias en documentos internacionales «a términos y expresiones ambiguas, tales como derechos y salud sexual y reproductiva».

(CitizenGo/

Diez países, encabezados por Estados Unidos, se han opuesto a la agenda abortista de la Cumbre de Nairobi. La representante del país norteamericano leyó un comunicado en el que asegura que no apoyan referencias en documentos internacionales «a términos y expresiones ambiguas, tales como derechos y salud sexual y reproductiva».

(CitizenGo/Aci Prensa) El intento de la ONU de imponer el aborto en todo el mundo, y especialmente en el continente africano, ha fracasado. 

La Cumbre ha tenido lugar del 12 al 14 de noviembre en Nairobi, la capital de Kenia, con ocasión del 25 aniversario de la Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo (ICPD) de El Cairo.

En conferencia de prensa celebrada en hoy, Valerie Huber, representante especial para Asuntos Globales de Salud Mundial de las Mujeres del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, leyó un comunicado, respaldado además por Bielorrusia, Brasil, Egipto, Haití, Hungría, Polonia, Santa Lucía, Senegal y Uganda. Destacó que en la cumbre El Cairo de 1994 se reconocía que «todos tienen el derecho a la vida, la libertad y la seguridad de la persona y que la familia es la unidad básica de la sociedad y como tal debe ser fortalecida».

«No podemos apoyar una educación sexual que fracasa en dar el lugar adecuado a los padres y que promueve el aborto como un método de planificación familiar», dijo.

Además, en nombre del grupo de diez países, Huber aseguró que  no se dio la suficiente «transparencia e inclusión en la preparación de la Conferencia, incluyendo lo que se refiere a los criterios para la participación de la sociedad civil».

«Mientras que el Programa de Acción de la ICPD de El Cairo fue negociada e implementada con y por todos los miembros de la Asamblea General de la ONU, solo un pequeño grupo de gobiernos fueron consultados sobre la planificación y modalidades de la Cumbre de Nairobi», explicó.

«Por tanto, los resultados de esta cumbre no son negociados intergubernamentalmente, ni son el resultado de un proceso de consenso. En consecuencia, no deberían ser considerados obligatorios, ni deberían aparecer en futuros documentos como lenguaje acordado intergubernamentalmente», añadió.

Huber expresó además la preocupación de los diez países «por el contenido de algunas de las prioridades claves de esta Cumbre».

«No apoyamos referencias en documentos internacionales a términos y expresiones ambiguas, tales como derechos y salud sexual y reproductiva, que no gozan de consenso internacional, ni contemplan las reservas y advertencias incorporadas en el resultado de El Cairo», dijo.

La Santa Sede no ha participado en la Cumbre, pero el Nuncio en Kenya dijo ayer que era «lamentable» que la ONU pretenda «inventarse» nuevos derechos.

Las ONGs provida no pudieron participar en el evento, dándose además la circunstancia de que la policía keniata quiso impedir manifestaciones contra la Cumbre:

Prensa) El intento de la ONU de imponer el aborto en todo el mundo, y especialmente en el continente africano, ha fracasado. 

La Cumbre ha tenido lugar del 12 al 14 de noviembre en Nairobi, la capital de Kenia, con ocasión del 25 aniversario de la Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo (ICPD) de El Cairo.

En conferencia de prensa celebrada en hoy, Valerie Huber, representante especial para Asuntos Globales de Salud Mundial de las Mujeres del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, leyó un comunicado, respaldado además por Bielorrusia, Brasil, Egipto, Haití, Hungría, Polonia, Santa Lucía, Senegal y Uganda. Destacó que en la cumbre El Cairo de 1994 se reconocía que «todos tienen el derecho a la vida, la libertad y la seguridad de la persona y que la familia es la unidad básica de la sociedad y como tal debe ser fortalecida».

«No podemos apoyar una educación sexual que fracasa en dar el lugar adecuado a los padres y que promueve el aborto como un método de planificación familiar», dijo.

Además, en nombre del grupo de diez países, Huber aseguró que  no se dio la suficiente «transparencia e inclusión en la preparación de la Conferencia, incluyendo lo que se refiere a los criterios para la participación de la sociedad civil».

«Mientras que el Programa de Acción de la ICPD de El Cairo fue negociada e implementada con y por todos los miembros de la Asamblea General de la ONU, solo un pequeño grupo de gobiernos fueron consultados sobre la planificación y modalidades de la Cumbre de Nairobi», explicó.

«Por tanto, los resultados de esta cumbre no son negociados intergubernamentalmente, ni son el resultado de un proceso de consenso. En consecuencia, no deberían ser considerados obligatorios, ni deberían aparecer en futuros documentos como lenguaje acordado intergubernamentalmente», añadió.

Huber expresó además la preocupación de los diez países «por el contenido de algunas de las prioridades claves de esta Cumbre».

«No apoyamos referencias en documentos internacionales a términos y expresiones ambiguas, tales como derechos y salud sexual y reproductiva, que no gozan de consenso internacional, ni contemplan las reservas y advertencias incorporadas en el resultado de El Cairo», dijo.

La Santa Sede no ha participado en la Cumbre, pero el Nuncio en Kenya dijo ayer que era «lamentable» que la ONU pretenda «inventarse» nuevos derechos.

Las ONGs provida no pudieron participar en el evento, dándose además la circunstancia de que la policía keniata quiso impedir manifestaciones contra la Cumbre: